El sucio secreto de la India tiene un lado positivo: la contaminación del aire que afecta a millones de personas en las congestionadas ciudades del país se puede transformar en expresión humana creativa con la ayuda de un ingenioso invento.
Un equipo de cuatro jóvenes científicos ha desarrollado un dispositivo especial que recoge el hollín de carbono de los gases de escape de los motores y que luego transforma en diferentes tipos de tinta y pintura, a los que han llamado AIR-INK.
Por ejemplo, uno de sus bolígrafos llenos de tinta se puede rellenar con el hollín recogido tras conducir durante tan solo 45 minutos en Delhi. Imaginemos la asombrosa cantidad de cartuchos que se podrían rellenar si tan solo una fracción de los 9 millones de coches que circulan por las carreteras de Delhi utilizaran el dispositivo.
A principios de este año, los emprendedores llevaron su idea a la plataforma global de financiación colectiva Kickstarter para recaudar fondos para seguir desarrollándola. Su período de financiación duró 30 días, del 7 de febrero al 9 de marzo, y su objetivo era recaudar 14.000 dólares.
A los posibles patrocinadores les encantó su producto y Graviky Labs terminó con $41,076 de fondos prometidos y toneladas de comentarios positivos. Muchos patrocinadores comentaron el hecho de que sus propias ciudades podrían usar los dispositivos para combatir la contaminación del aire de una manera significativa.
Según la información del sitio Kickstarter, todo comenzó como un experimento en el Media Lab del MIT en Cambridge, Massachusetts. La idea inicial era fabricar una impresora portátil que utilizara hollín de velas, y el prototipo preliminar fue recibido con entusiasmo por ambientalistas y artistas por igual. Desde 2014, han estado trabajando en formas de recolectar la contaminación de los motores y otras fuentes en la India, y descubrieron que podrían tener un impacto real.
Graviky Labs está formado por Anirudh Sharma, Nikhil Kaushik, Nisheeth Singh y Nitesh Kadyan. Su dispositivo de reacondicionamiento de tubos de escape KAALINK incorpora filtros, sensores y una unidad de captura y utiliza filtración electrostática, filtración en profundidad y filtración de flujo de pared para recolectar el tipo correcto de contaminación de los tubos de escape de los automóviles.
En el laboratorio, el equipo purificará la contaminación recolectada para eliminar toxinas como polvo reentrante, metales pesados, aceite, carcinógenos, COV y más. El hollín restante se muele luego hasta obtener un tamaño de partícula uniforme para que el pigmento quede suave. Su línea de productos inicial incluye bolígrafos de punta redonda, marcadores de punta biselada y tinta para serigrafía. 
A los ambientalistas les encanta el hecho de que no es necesario quemar deliberadamente combustibles fósiles para producir hollín de carbono para la tinta, sino que el proceso utiliza los combustibles fósiles que ya se queman en los automóviles, eliminando así la contaminación del aire de las calles y convirtiéndola en algo útil.
Pero, ¿es seguro? Si bien no recomiendan ingerir su tinta, los empresarios afirman que sus tintas y pinturas son tan seguras como cualquier otra disponible en el mercado.
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