La primavera está a la vuelta de la esquina, y eso significa salir de la hibernación y ponerse a trabajar en casa.
No sólo se acerca la temporada de limpieza de primavera, sino que también es uno de los mejores momentos para poner una casa a la venta.
Hay muchas razones por las que la primavera es la temporada más activa en el mercado inmobiliario:
Incluso si no está listo para colocar un cartel de “En venta”, estos consejos pueden ayudarle a sentirse bien con la casa en la que vive.
Es un rito anual que se ha convertido en una parte importante de la primavera para muchos propietarios, y es fácil ver por qué: después de un exhaustivo esfuerzo de limpieza de primavera, es divertido mirar alrededor y disfrutar de una casa más limpia y bien organizada. 
Una limpieza de primavera perfecta implicará muchas horas, proyectos y ayudantes (pero no confíe solo en nuestras palabras, Martha Stewart tiene una lista de verificación completa para imprimir que puede consultar).
Sin embargo, hay algunas cosas que debemos tener en cuenta para garantizar que la limpieza de primavera sea un éxito:
Planifique el tiempo para la limpieza de primavera y haga una lista de las tareas que desea realizar. Luego, asegúrese de tener todos los productos y herramientas que necesita. Establezca metas realistas.
Los productos de limpieza tradicionales están llenos de sustancias químicas nocivas, muchas de las cuales se han relacionado con efectos a corto y largo plazo sobre la salud. Nunca mezcle productos de limpieza y, si es posible, utilice alternativas no tóxicas, como vinagre, bicarbonato de sodio y agua caliente.
Ya sea media hora de tiempo a solas (con una taza de té y un libro o una revista, ¿alguien quiere?), algunos elementos de decoración nuevos o una comida para llevar para que nada ensucie la cocina, la recompensa adecuada hará que sea más fácil realizar las tareas de limpieza de primavera.
Vender o no, una casa bien organizada hace la vida más fácil. Evalúe cada habitación individualmente y deshágase del desorden, los muebles viejos y destartalados y todo aquello que distraiga la atención de los encantos naturales de la casa. No necesita gastar mucho dinero para causar una buena primera impresión a sus amigos o posibles compradores.
Reparar pequeños agujeros en las paredes, reemplazar bombillas quemadas, cubrir los rayones en los zócalos del piso con una nueva capa de pintura: todos estos pequeños trabajos ayudarán a generar una sensación de logro y pueden marcar la diferencia en el proceso de venta de la casa.
Tómese un tiempo en el jardín para limpiar ramas y hojas, plantar algunas flores nuevas y asegurarse de que la casa cause una buena impresión incluso antes de que la gente entre a la casa.
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